Prótesis dentales
Las prótesis dentales son una de las principales soluciones ante la pérdida de dientes, un problema que afecta a una parte importante de la población. Dada su relevancia, en las clínicas MAEX contamos con un amplio equipo de prostodoncistas. Su experiencia a lo largo de más de 20 años y cientos de prótesis colocadas con éxito, unida a su formación especializada, capacita a nuestros prostodoncistas para tratar casos complejos.
Las prótesis dentales están diseñadas para reemplazar dientes perdidos, restaurar dientes dañados o mejorar la estética. Su colocación mejora la salud, funcionalidad y estética de la boca. Entre otras cosas, el uso de prótesis favorece la apariencia de la sonrisa, aumenta la comodidad a la hora de comer o hablar y previene el desplazamiento de los dientes que quedan en la boca.
Las prótesis dentales se fabrican a medida de cada paciente y pueden estar confeccionadas con diferentes materiales, tales como cerámica, metal, resina acrílica, etc. A su vez, pueden ser fijas o removibles, así como completas o parciales, en función del número de dientes que se necesite reponer.
Existen diferentes tipos de prótesis dentales. Cada una de ellas presenta una serie de características, por lo que la elección dependerá de las necesidades individuales de cada paciente.
Las prótesis dentales solucionan diversos problemas relacionados con la pérdida de dientes y la salud oral. Algunos de los problemas que pueden resolver son los siguientes:
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Dificultades para masticarLa falta de dientes afecta a la capacidad de masticar adecuadamente, sobre todo los alimentos más duros. Esto puede limitar la dieta y llevar a problemas digestivos (fruto de una trituración insuficiente de los alimentos).
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Alteraciones en el hablaLa ausencia de dientes puede dificultar la pronunciación de ciertos sonidos. Por tanto, las prótesis ayudan a mejorar la claridad del habla.
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Desplazamientos de los dientes vecinosCuando faltan dientes, el resto de piezas dentales tienden a desplazarse hacia los espacios vacíos, lo que puede causar problemas de alineación y oclusión. Por tanto, las prótesis ayudan a mantener la posición correcta de todos los dientes.
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Pérdida de la estética facialA la larga, la falta de dientes llega a afectar a la apariencia facial, ya que causa hundimiento de las mejillas y los labios, lo que envejece el aspecto de la persona. Mediante la colocación de una prótesis dental se puede restaurar la estructura facial y mejorar la estética de la cara.
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Empeoramiento de la apariencia de la sonrisaA su vez, la ausencia de dientes perjudica la estética de la boca.
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Problemas de autoestimaEl compromiso estético puede reducir la autoestima de la persona, así como hacerla menos propensa a sonreír y a las interacciones sociales.
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Distribución desigual de la fuerza de mordidaLa falta de dientes hace que las piezas dentales que permanecen en la boca tengan que soportar una carga mayor, lo que puede llevar a desgastes en el esmalte y daños más graves, como fracturas. Por tanto, las prótesis dentales ayudan a distribuir la fuerza de mordida de manera uniforme.
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Desequilibrios en la mandíbulaLas alteraciones en el número y la posición de los dientes pueden provocar desequilibrios en la mordida y problemas en la articulación temporomandibular (ATM).
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Incomodidad y dolorLa ausencia de dientes puede causar molestias en las encías, especialmente a la hora de masticar. Las prótesis proporcionan una superficie de masticación cómoda y alivian el dolor.
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¿Cuánto dura una prótesis dental fija?
El tiempo que dura una prótesis fija depende, en gran medida, de los cuidados que siga el paciente (higiene oral, alimentación, asistencia a revisiones…). Lo que sí podemos decirte es que una prótesis dental fija está pensada para ser una solución duradera y a largo plazo.
Para alargar al máximo la duración de una prótesis dental fija es imprescindible que la persona se cepille los dientes después de cada comida y utilice seda dental al menos una vez al día (antes de acostarse).
Además, es necesario tener ciertas precauciones al comer alimentos especialmente duros (kikos, chocolate guardado en la nevera, aceitunas con hueso, turrón duro…). Esto se debe a que, al igual que los dientes naturales, las prótesis se pueden fisurar o fracturar si se usan con demasiada fuerza.
Por último, también es fundamental acudir a las revisiones periódicas pautadas por el prostodoncista. De esta manera, el profesional podrá revisar el estado de salud oral del paciente y las condiciones en las que se encuentra la prótesis. Asimismo, en estas revisiones se podrá pautar la frecuencia con la que el paciente debe acudir al higienista dental para que lleve a cabo una higiene profesional de su boca y de la prótesis.
¿Cuánto dura una prótesis dental removible?
Al igual que sucede con la prótesis fija, la duración de una prótesis dental removible dependerá, sobre todo, de los cuidados que siga el paciente (higiene oral, alimentación, asistencia a revisiones…).
Sin embargo, hay que tener en cuenta que las prótesis removibles necesitan un mayor mantenimiento que las fijas. Esto incluye la necesidad de limpiarlas varias veces al día, cada vez que se retiran, y de realizar reajustes en su estructura. Como ya hemos indicado, las prótesis removibles tienen cierta tendencia a la movilidad. Por ello, es necesario que el odontólogo reajuste la prótesis periódicamente, con el objetivo de que no se mueva y sea más cómoda para el paciente.
¿Cómo hay que limpiar una prótesis dental?
En este punto, debemos distinguir entre prótesis dentales fijas y removibles. Por un lado, la prótesis fija funciona igual que las piezas dentales naturales. Esto hace que, para limpiarla, solo sea necesario cepillarse los dientes con normalidad después de cada comida. Adicionalmente, los odontólogos suelen pautar limpiezas profesionales de las prótesis fijas una vez al año, aproximadamente. En estas citas, desmontan la prótesis con instrumental especial para limpiarla de manera más exhaustiva.
Por otro lado, las prótesis removibles requieren una limpieza diaria específica. El paciente, además de lavarse los dientes, debe limpiar la prótesis cada vez que la retire. Para ello, puede utilizar un cepillo especial para dentaduras postizas y jabón neutro. Además, entre una y dos veces a la semana es recomendable sumergir la prótesis varios minutos en una solución con agua y una pastilla efervescente para limpiar prótesis dentales. Esta rutina mejora la higiene de la prótesis y ayuda a evitar la acumulación de placa bacteriana y sarro.
Francisco Javier Elizondo es licenciado en Medicina y Cirugía por la Universidad del País Vasco, especialista en Cirugía Oral y Maxilofacial y especialista en Estomatología. Además, es doctor en Medicina y Cirugía por la Universidad Autónoma de Barcelona. A lo largo de su trayectoria profesional, el doctor Elizondo ha sido profesor asociado en la facultad de Odontología de la Universidad de Barcelona, ha participado en la publicación de distintos libros y artículos sobre Cirugía Oral y Maxilofacial y ha realizado diversas rotaciones en hospitales de Europa y Estados Unidos.