Los implantes dentales son, por lo general, la solución más adecuada para reemplazar los dientes perdidos. Sin embargo, no todos los pacientes son buenos candidatos a este tratamiento, ya sea por motivos médicos, económicos o personales. Ante esto, es normal que surja la siguiente pregunta: ¿existen alternativas al implante dental? En este artículo, vamos a explorar las distintas soluciones y analizaremos cuándo y por qué se deben aconsejar las alternativas a los implantes dentales.
Alternativas al implante dental
Afortunadamente, existen varias alternativas al implante dental que pueden ofrecer resultados satisfactorios. En función de las circunstancias y preferencias de cada paciente, las principales soluciones son dos: los puentes dentales fijos y las prótesis removibles.
1- Puentes dentales fijos
El puente dental es una prótesis fija, que el paciente no se puede quitar, y que permite sustituir uno o varios dientes. Se utiliza para tramos cortos de la arcada dentaria y requiere la presencia de dos dientes pilares adyacentes al espacio vacío. La prótesis está compuesta por al menos tres dientes (ya que simula los dos dientes adyacentes y el faltante) y se apoya sobre las piezas dentales que funcionan como pilar. De esta manera, se mantiene fijada y rellena el hueco faltante con un diente artificial.
Las principales ventajas del puente dental es que su colocación no requiere cirugía y es más sencilla. Además, es mucho más asequible que un implante.
Sin embargo, su desventaja más evidente es que la colocación de un puente requiere tallar los dientes adyacentes que funcionan como pilar. Es decir, hay que rebajar el esmalte de los dientes vecinos para que el puente pueda encajar sobre ellos.
2- Prótesis dentales removibles
Otra alternativa a los implantes dentales es la prótesis removible. Esta solución es especialmente útil en casos de edentulismo parcial o total, ya que permite reemplazar varios dientes con una sola prótesis.
Las prótesis removibles también ofrecen beneficios económicos, ya que son más asequibles que los implantes dentales. Sin embargo, pueden resultar algo incómodas. Al no ser fijas, es necesario retirarlas regularmente (para limpiarlas y antes de dormir), pueden desajustarse y causar rozaduras en la boca.
Existen varios tipos de prótesis dentales removibles:
- Prótesis removibles parciales de resina: se sujetan a los dientes naturales que el paciente mantiene en la boca mediante unos ganchos metálicos.
- Prótesis dentales flexibles: se fabrican con materiales flexibles y ligeros como el nylon, por lo que son más finas y cómodas. Además, cuentan con ganchos del mismo material, por lo que resultan más discretas.
- Prótesis removibles esqueléticas: se emplean en personas que presentan una pérdida localizada de dientes en una zona o en varias zonas de la boca. Están confeccionadas con resina y metal y cuentan con ganchos metálicos.
- Prótesis removibles completas (mucosoportadas): se usan para reemplazar todos los dientes de una arcada. Se apoyan directamente sobre la mucosa oral (encía y hueso alveolar) y se sujetan mediante un mecanismo de succión y/o adhesivos dentales.
Reponer dientes sin implantes: ¿tiene consecuencias?
Es importante entender que, aunque las alternativas al implante dental pueden ser eficaces, también pueden tener ciertas limitaciones y consecuencias a corto, medio y largo plazo:
- Pérdida ósea: los implantes dentales se colocan en el hueso maxilar y lo estimulan, previniendo su reabsorción. Las alternativas, como puentes y prótesis removibles, no ofrecen esta estimulación, lo que puede llevar a una pérdida ósea progresiva.
- Molestias y menor capacidad masticatoria: aunque los puentes y prótesis removibles pueden mejorar la masticación, no siempre ofrecen los mismos resultados que un implante dental. La masticación se puede ver especialmente afectada en caso de colocar una prótesis removible.
- Desgastes dentales: cuando la masticación se ve alterada, es habitual que aumente la presión sobre determinados dientes. Esto se debe a que las molestias y dificultades en la masticación modifican el patrón habitual, lo que puede hacer que la persona priorice, por comodidad, la masticación en una zona de la boca. Esta presión desgasta y debilita los dientes afectados, haciéndolos más propensos a fracturas.
- Tallado dental: el tallado de los dientes vecinos es un procedimiento indispensable antes de colocar un puente dental. Este proceso, aunque sea mínimamente invasivo, debilita algo el esmalte de los dientes.
¿Cuándo se recomiendan las alternativas al implante dental?
Aunque los implantes dentales son considerados, en la mayoría de los casos, la solución más adecuada para sustituir los dientes perdidos, lo cierto es que hay situaciones en las que se deben plantear otras opciones. Las principales razones por las que se buscan alternativas al implante dental son las siguientes:
- Condiciones médicas: algunos pacientes presentan enfermedades o condiciones médicas que desaconsejan la colocación de un implante dental (diabetes sin controlar, problemas de coagulación, consumo de ciertos medicamentos…). Este tipo de situaciones pueden alterar la respuesta del organismo a la cirugía, afectar al postoperatorio, dificultar el proceso de osteointegración y reducir la probabilidad de éxito del tratamiento. Cuando esto sucede, resulta necesario buscar soluciones alternativas al implante dental.
- Miedo a la cirugía: el miedo a una cirugía oral es otra razón por la que algunos pacientes descartan la colocación de implantes dentales. En estos casos, los puentes o prótesis removibles pueden ser más adecuados, ya que su colocación es más sencilla.
- Requisitos de salud bucal: los implantes dentales requieren una buena calidad y cantidad de hueso maxilar. Si el hueso no presenta las condiciones adecuadas habrá que valorar la posibilidad de recurrir a una regeneración o injerto óseo. Esta posibilidad puede ser descartada por razones médicas (riesgos asociados a ciertas condiciones de salud) o personales del paciente (rechazo a una cirugía de mayor envergadura).
- Coste económico: en función de los dientes que se necesiten reponer, la colocación de implantes dentales pueden suponer una inversión económica significativa, que no todos los pacientes están dispuestos o son capaces de asumir. Por lo general, las alternativas al implante dental son más económicas.
¿Cómo elegir la mejor alternativa al implante dental?
Para elegir la alternativa más adecuada a los implantes dentales es necesario evaluar cuidadosamente una serie de factores. A continuación, te contamos en qué se basa el odontólogo para recomendar la mejor alternativa:
- Estado de salud bucal: es fundamental estudiar el estado de los dientes y las encías, así como la calidad y cantidad de hueso maxilar.
- Requerimientos de la boca: en función de las necesidades de cada paciente, se podrá proponer un tipo de tratamiento u otro. Entre otras cosas, es necesario valorar el número de dientes a reponer y su ubicación en la boca.
- Expectativas del paciente: para encontrar la alternativa más adecuada hay que valorar los objetivos estéticos y funcionales del paciente. De esta manera, se puede determinar qué solución va a encajar mejor con sus expectativas.
- Comodidad y estilo de vida: el odontólogo también debe trasladar al paciente cómo va a afectar cada opción a su día a día. Por ejemplo, una prótesis removible requiere emplear varios minutos cada día para limpiarla.
- Presupuesto: en general, lo más adecuado es dejar las consideraciones económicas a un lado y primar lo relativo a la salud y funcionalidad de la boca. Sin embargo, algunos pacientes no pueden hacer frente a un tratamiento de implantes dentales y resulta imprescindible valorar alternativas. Dicho esto, es importante recordar que, aunque algunas opciones son más económicas inicialmente, pueden requerir más mantenimientos o reemplazos en el futuro.
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